La descarga o escape de gases de las aplicaciones industriales pueden tener un alto nivel de contaminación sonora, de manera que se requiere la implementación de mecanismos atenuadores, siendo muy comunes los silenciadores de escape.

La interesante física de estos silenciadores está determinada por el funcionamiento combinado de cámaras de expansión interna que se encargan de adaptar los volúmenes en función de los objetivos específicos de aislamiento acústico.

Con aplicaciones tradicionales en motores de combustión interna y salas generadores de gases, los silenciadores de escape entregan el máximo rendimiento en virtud de cualidades adicionales como material aislante de certificación internacional y revestimientos de primera categoría.